El alumnado de bachillerato ha disfrutado de su viaje de fin de estudios con un crucero por el Mediteráneo.

Un viaje donde no han faltado canciones, risas, sueño,…

Se embarcaron el Costa Smeralda, exploraron todos sus rincones, disfrutaron de bailes, cenas, fiestas, …

Hicieron escala en Mallorca, visitando los lugares más emblemáticos, como la lonja, la catedral, el palacio de Almudaina y la Plaza Mayor y con algo de tiempo libre para hacer compras.

Otra escala fue en Palermo, recorriendo sus calles principales, Via Roma y Via Vittorio Emanuele, donde se encontraron los famosos Quattro Canti. Visitaron la catedral, el palacio real y el pintoresco y popular Mercato del Capo. Por supuesto, no se podían ir de Palermo sin probar sus típicos cannoli siciliani y el gelato.

Después tocó Roma, donde pudieron disfrutar de la città eterna y se deleitaron con una buena pizza romana frente a la ciudad del Vaticano.

Última escala, en Savona, desde la cual visitaron Génova, una de las ciudades más importantes de Liguria. Durante el trayecto, la guía nos fue contando curiosidades sobre la región, y una vez en Génova, visitaron la catedral, la casa de la ópera, la plaza de Ferrari, la famosa casa de Cristóbal Colón y sus pintorescas callejuelas llenas de historia. Tuvieron la oportunidad de degustar el famosísimo pesto genovés y su pescaíto frito.

Y colorín colorado, el viaje ha terminado. No hay mejor forma de poner punto y final a este viaje que visitando Marsella.

Iniciaron la visita hacia su catedral, recorrieron la fortaleza de San Juan y pasearon por el paseo marítimo, donde había un mercado en el que pudieron ver y probar productos típicos locales. Aprovecharon también para comprar el famoso jabón de Marsella.

¡Cuántas aventuras por contar!
Ci vediamo presto!

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